Hernán Dobry

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9 junio, 2020

“Uno es parte de todos los personajes que hace y todos los que amó”

Santiago Loza ha vuelto a la novela. En su segunda incursión en el género, el escritor, dramaturgo y cineasta cordobés recrea la historia de un chico, amante de la pantalla grande, que deja su pueblo natal en el interior del país, rompe con su pasado y se muda a la gran ciudad.
En una entrevista exclusiva con el programa “Letras y corcheas”, que se emite por Eco Medios AM 1220 los jueves a las 22, explica cómo fue el proceso de creación de este libro, además del de sus obras de teatro y películas.

Mario Dobry (MD): ¿Qué es una idea artística en el plano literario y cómo acometer una idea artística para que se haga sostenible dentro de la ficción que uno está escribiendo?
Santiago Loza (SL): Una idea literaria o artística tiene que ver con una insistencia, con algún elemento que se va colando en los sueños o en los pensamientos diario que empieza a volverse obsesivo, cierta zona donde uno empieza a darse cuenta de que hay un pensamiento recurrente sobre cierta frase o recuerdo que alguien te contó o cierta imagen. Para mí, tiene que ver con esa recurrencia que empieza a aparecer en el cotidiano de uno y que uno siente la necesidad de llevar adelante. Después, uno siente que esa idea tiene fuerza o más débil, es como un embrión, tiene más fuerza o es más débil de acuerdo por como uno puede trabajar ese deseo y sostenerlo en el tiempo. Hay ideas que son más perecederas que no se concretan y otras que a uno lo acompañan un largo período de tiempo.

Hernán Dobry (HD) Roberto “Tito” Cossa me dijo en una entrevista hace un tiempo que su disparador era un diálogo, que eso era lo primero que le venía a la cabeza, y a partir de ahí, iba escribiendo toda la obra y eso podía formar parte o no después. ¿En tu caso se da a través de imágenes? ¿Cómo empieza ese proceso de escritura?
SL: Lo que le pasa a Tito Cossa a través del diálogo, yo trabajo mucho jugando con que escribo muchos monólogos. Eso aparece primero para tener el oído ajustado para entender una voz, más la propia, tomar una ajena y hacérsela propia, a descubrir y entrar en una zona más inesperada, donde uno arma ciertas estrategias provisorias. Me pasa eso, de empezar a escuchar la de esos personajes. Entonces, son dos o tres páginas donde pruebo. Es algo similar, aunque mucho más complejo, como hacen los músicos cuando van afinando los instrumentos, probando. A mí me pasa eso, que escribo un párrafo y voy probando una musicalidad, la cadencia que tiene esa voz y también su lógica.

MD: Leyendo “La primera casa”, comenzás con un sueño, luego a medida que avanza la obra los sueños comienzan a tomar una preponderancia en todo el escrito. Hay cuatro sueños que los he sentido como que declaran la obra. ¿Esa fue tu idea de transcribir en sueños los que luego iba a ser realidad?
SL: Sabía que la novela arrancaba con un sueño y que estaba vinculada al cine. A mí, el cine es la posibilidad de soñar como en un lugar oscuro con los ojos abiertos. Fue casi como orgánicamente que arrancase y quizás termina con un sueño. Cuenta la situación de un adolescente como en un ámbito bastante opresivo, entonces la posibilidad de soñar o del cine viene a ser un espacio bastante libre. Incluso, la posibilidad de narrar. Para mí siempre la posibilidad de la ficción o narrativa ha sido un espacio de mucha libertad. Eso lo siento en lo que hago.

HD: ¿Qué hay tuyo en ese adolescente que tiene todo un trajinar en su pueblo original hasta que se va a la gran ciudad?
SL: Hay algunas, soy de provincia, pero no es algo biográfico. Como otras ficciones está desdibujado. El caso del personaje de La primera casa, vive en un pueblo chico y es huérfano. Yo no era huérfano a esa edad. Mi padre lo era y siempre me inquietó escribir y entender la orfandad, uno tiene ciertas inquietudes y, quizás, la novela jugaba con un cine medio pop, que no es el que generalmente hago o veo y que me nutrió en la adolescencia. O sea, era un cierto tributo a ese cine más de shampoo, descartable. Escribir esa trama era para mí un modo de ponerlas en valor que en otras obras no lo hice. Era mostrar eso, esa fascinación por el cine e inevitablemente ser del interior. A mí, ser del interior me constituye. Vine a Buenos Aires hace 25 años, pero hay algo que lo llevás en el ADN, ser de provincia.

MD: Hablando de los sueños y siguiendo con la obra, en una de las películas que narrás, el sueño que cuenta o la ensoñación porque se desmaya es como que resuelve ahí una problemática que, luego, va a trasladar a la vida. O sea, es una de las formas del sueño. El sueño como lugar o espacio de la vida para poder desarrollar lo que luego se va a dar en la vida y, después, la chica como el hermano sienten qué es lo que desean de la vida, si realmente continúa así porque me quejo o rompo con eso. En tu caso personal, cuando has venido de Córdoba a Buenos Aires, ¿qué cosa de Gonzalo o Diana está en vos?
SL: Uno es parte de todos los personajes que hace y todos los que amó. Me parece lindo lo que hablás de esa película menor de Coppola, que un personaje tiene en un sueño la posibilidad de resolver su vida. Lo que hay en mí que está en los personajes que uno tiene que salir de la imposibilidad, de algo que te dice desde afuera que no vas a poder hacer. Querer ser escritor o hacer cine, a veces en ciertos ámbitos, en los ’80 en la provincia era como ser astronauta. El no era algo fácil. Era esa cosa como: por qué el vecino va a escribir una novela si es mi vecino. El no, lo tuve muchas veces y, quizás, lo que tienen los personajes es ir más allá del no. El caso de Peggy Sue, de la película, es ir más allá de lo posible. Hay una zona de fantasía hasta que uno la concreta y cuando lo hace nunca tiene la dimensión de la fantasía. Cuando era muy chico soñaba con hacer películas, pero después todo el camino que tuvo con hacerlas fue tan complejo que no tuvo esa cualidad radiante que tenía, quizás, en lo que había imaginado.

Si querés ver o escuchar la entrevista completa que le realizaron Hernán y Mario Dobry al cantante Oscar Pometti en su programa “Letras y corcheas”, que se emite por Eco Medios AM 1220 los jueves a las 22, hacé clic en los banners.

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